Por: Curro González, sobreescalada.com
El día era gélido y ventoso, y se nos ocurrió visitar este emblemático Hueco en busca de refugio.
Y la verdad es que fue todo un acierto, ya que pudimos disfrutar de temperaturas agradables al sotavento de las grandes paredes, en una espectacular y despejada jornada invernal.
El Hueco de la Hoces es uno de los rincones más espectaculares de la Pedriza, es un agreste callejón que alberga grandes paredes a ambos lados, por su interior transita una tortuosa senda que da acceso nada más y nada menos que a la cara Norte del conocido Yelmo.

El Risco del Hueco de la Hoces, Pan de Kilo, el Elefantito del Yelmo, el Yelmo, son algunos de los riscos más conocidos que forman este lugar; pero encontramos otras sorprendentes formaciones como: el Jamón, el Dinosaurio, la cara norte de la Aguja Larios, la Bola de San Antonio, el Predicador y un largo etcétera, que bien merecen una visita si no los conocéis.
A continuación os dejo una propuesta, que podría servir como una primera toma de contacto, para una jornada agradable de escalada.
Risco del Hueco de la Hoces
Vulgarmente se conoce con este nombre a la gran formación rocosa que ocupa gran parte del margen izquierdo del Hueco, está compuesta por diferentes paredes de considerable magnitud, denominando a la Pared Principal, la llamativa placa con las características y largas vetas de Cuarzo.

Óscar y Raúl
Conocida escalada que forma parte del cuarteto de rutas abiertas a finales de los años 70 en el Hueco de las Hoces (junto con las vías Óscar y Raúl del Pan de Kilo, el Elefantito del Yelmo y la cara norte del Yelmo), se podría considerar como la ruta más clásica y factible del risco (ojo, que en algún lugar llega a ser expuesta).
Pese a encontrar algún seguro fijo, deberemos llevar material de autoprotección para poder escalarla con seguridad.
Los mismos aperturistas abrieron una entrada directa más difícil que enlaza con el segundo largo, evitando de esta manera la expuesta travesía del primer largo.

Desde el final del rapel accedemos fácilmente al comienzo de la siguiente ruta de escalada.
La Cañada
Sin duda alguna es la ruta más espectacular de las tres propuestas, transita por el característico nervio de Cuarzo del margen izquierdo de la pared.
La ruta fue abierta por Fernando Cobo y Fernando Asenjo en el año 88, en su apertura emplearon tan solo un buril como seguro fijo. Hoy en día se puede considerar una escalada semiequipada, contando con 5 seguros fijos (más reuniones) en su trazado.
Pese a todo no es una ruta de escalada que regalan, ya que en los dos largos deberemos emplearnos a fondo para poder escalarlos con solvencia (uno requiero físico, el otro cabeza).


*El Risco del Hueco de las Hoces se encuentra regulado íntegramente del 1 de Enero al 31 de Julio, más información sobre las regulaciones en la Pedriza, en:
Milhojas
Para finalizar la jornada deberemos andar unos 15 minutos en dirección al Pan de Kilo, escondida en un pequeño jardín a nuestra izquierda, encontramos esta característica pared (que bien, queda algo alejada de las paredes del Risco del Hueco de las Hoces, aunque la englobamos en las mismas).

Se trata de una agradable escalada, en un sorprendente y solitario rincón de la Pedriza, con unas vistas y un aura inigualables.
La vía se encuentra prácticamente equipada, aunque conviene llevar algún friend pequeño y mediano.
No podéis dejar de leer la historia de esta ruta contada por Wimbor, uno de sus aperturistas.
El descenso se efectúa destrepando por terreno aterrazado hacia la brecha que da paso de nuevo al jardín, en el margen derecho.