Se me había olvidado lo mucho que me gusta correr por la montaña. Hacía tiempo que no podía practicar este deporte que tanto me ha gustado y tan buenos momentos me ha aportado.
Lo que tanto me gusta de correr por la montaña, intimidad propia para conversar con uno mismo, por un periodo largo de tiempo fue lo que me alejó de practicarlo. No era buen compañero para estas aventuras. Además, cuando ya pude conversar conmigo mismo, me lesioné el metatarso del pie derecho y anduve parado otro tiempo largo.

Desde muy joven he estado vinculado a este deporte, practiqué Atletismo muchos años y más tarde durante un periodo corto de tiempo, participé en la carreras de montaña. Pero lo que realmente me gusta es estar libre, libre de cronómetros, libre de gente y con un recorrido errante y a veces «salvaje«.
Son infinidad de rutas las que tengo la suerte de poder realizar por los alrededores de mi actual residencia. Vivir en las montañas, aunque sean «chicas» y cerca de Madrid, aporta unos privilegios que no encontrarás en la Calle Serrano. Y si, esta lejos, pero es precisamente lo que busco.

Hoy he ido a correr a la Najarra y he recordado que en uno de estos días de «carrera» fui al Cerro de San Pedro, donde hice unas grabaciones y posteriormente un montaje de video. Aquí os lo dejo.