Por: Curro González, sobreescalada.com
Os voy a dejar dos propuestas de escalada para aquellos escaladores inquietos de exquisito paladar, espero estar a la altura de vuestras expectativas. Personalmente a mi, me han gustado mucho.
La Seta
Espectacular y llamativo farallón rocoso de aspecto inaccesible.
«Los Negacionistas» es una propuesta que aprovecha las debilidades de la pared para superarla en una dura escalada semiequipada en libre.

Largo 1: Comenzamos en la vertical de una placa, con un paso duro para montarse en ella. Más tarde tenemos un paso obligado de 6c en donde conviene no caerse (corremos el riesgo de picar suelo), resulta más sencillo por el margen derecho. El siguiente tramo es de «templar» en buena roca con agujeros y regletas, hasta llegar con tendencia a izquierda, a un paño más compacto en donde encontramos los pasos más estéticos y duros del largo (7a). Una vez superados estos, accedemos a un pequeño diedro que nos deja en la primera reunión (6b).
Largo 2: Espectacular largo que atraviesa una zona de roca podrida y termina por la intimidante fisura desplomada que rasga el desplome final. Los primeros metros de escalada son sencillos hasta llegar a la franja de roca podrida (6b), en este punto encontramos unos pasos duros obligados si vamos en libre (7b/+) o dos pasos de uñas (A2). Una vez superado este tramo nos podemos dar «un aire» antes de acometer la siguiente sección dura, una fisura ciega bien equipada (7b+/c) que nos da acceso al desplome final.
Para entrar en la fisura final deberemos prestar atención al emplazamiento de los primeros seguros y a la colocación de pies (roca algo pobre), son pasos duros que se resuelve en 7b o A2.
El grado de dificultad del largo es una propuesta, no está encadenado. Están liberadas todas las secciones duras pero no están encadenadas, se puede superar en una combinación de escalada libre y artificial con una dificultad de 6b+ / A2.
El Puro
Sorprendente y llamativa formación rocosa que desafía a la gravedad irguiéndose en soledad. No es de extrañar por ello, que Daniel Guirles se fijara en ella y trazara su primera ruta de escalada en los años 90.

«Carlos Ortega» es una bonita escalada que se podría convertir en una gran clásica del valle. Supera de una manera muy elegante esta espectacular aguja rocosa.
Largo 1: Comenzamos la escalada por unas fisuras poco agradables, en la cara opuesta, para realizar una travesía hacia la derecha en busca de una pequeña brecha (V+). Desde aquí, para montarnos en la placa principal de la pared, superaremos unos movimientos técnicos de buen canto hasta llegar a la reunión primera (6b).
Largo 2: El siguiente largo busca una «fisura salvadora» que permite progresar por esta cara de la aguja en escalada en libre. A pocos metros de la reunión encontramos el paso más duro de toda la vía, un paso de equilibrio y regleta mínima que nos permite llegar al inicio de la nombrada fisura (7b o A0). Superamos esta, en una escalada más difícil de lo que a primera vista pudiera parecer (6c), hasta encontrar un inmenso agarre que nos da acceso a la parte final de la torre que se escala por la vertiente opuesta (6a).